5 Consejos para detectar casos de abuso o negligencia en residencias
Mientras que algunos casos de negligencia en centros especializados en el cuidado de personas mayores pueden ser descaradamente obvios (como aquellos en los que nuestro ser querido se mantiene sedado sin ninguna razón aparente), otros pueden resultar más sutiles y tienden a pasar desapercibidos por los familiares y amigos del paciente.
Si usted se ha dado cuenta de que un residente presenta alguna de las siguientes características, existe la posibilidad de que esté ante un caso de flagrante negligencia médica.
1. Escaras (llagas de presión) o heridas abiertas
Las residencias a menudo insisten en que la aparición de escaras es algo natural, totalmente normal en pacientes carentes de buena salud o que no pueden moverse a voluntad. Tristemente, muchas familias creen esta mentira y no hacen más que mirar mientras sus seres queridos experimentan dolor y complicaciones -a veces fatales- como resultado.
Pero lo cierto es que en el 99% de los casos las escaras no son más que el producto de un descuido o negligencia médica. Los lugares especializados poseen directivas estrictas que les obliga a mover a un paciente cada 2 ó 3 horas y a mantener sus sábanas o ropas totalmente secas, para prevenir que la humedad irrite la piel.
Por tanto, si uno de sus seres queridos presenta una llaga de presión, probablemente se deba a un incumplimiento del protocolo por parte del staff.
Una vez detectada la escara, los miembros de la familia deberían insistir en que el paciente sea trasladado a un centro médico para darle el tratamiento adecuado y contactar a un abogado para discutir sus derechos con respecto a la residencia.
2. Hematomas o magulladuras sin causa aparente, cortes, quemaduras, esguinces o fracturas
Aunque es verdad que los accidentes son más frecuentes entre pacientes con un estado de salud delicado, los familiares deberían ser acuciosos y tratar de averiguar el motivo de cualquier lesión ocurrida en la residencia, por más pequeña e insignificante que parezca.
Hay ocasiones en que los residentes son maltratados o sufren un descuido por parte del personal mientras están completamente sedados, de manera que cuando recobran la conciencia no recuerdan nada de lo ocurrido.
Los miembros de su familia no deberían dejar de preguntar qué fue lo que sucedió: si la enfermera o la persona a cargo de su ser querido responde de manera dudosa u ofrece una explicación incoherente, hay muchas posibilidades de que esté ante un caso de flagrante negligencia médica.
3. Presencia de prendas de ropa rotas, manchadas o con rastros de sangre
Si usted encuentra prendas de ropa rotas, manchadas o con rastros de sangre, existe una gran posibilidad de que su familiar haya sido víctima de abuso sexual. Este tipo de abuso es algo muy común en las residencias, especialmente entre pacientes que están medicados fuertemente o que presentan problemas de retención de memoria.
Así mismo, infecciones genitales y enfermedades venéreas sin causa aparente pueden ser otros signos de este maltrato.
Nuevamente, si no se le da una razón o explicación satisfactoria que aclare el por qué del estado de las prendas de vestir, retire inmediatamente a su ser querido de esa residencia y registre un informe de sus sospechas en las oficinas de las autoridades locales.
4. Negarse a recibir visitas o demorarse a la hora de tenerlas
Los familiares de un paciente deben estar alerta y sospechar si el personal de la residencia en cuestión ‘gana tiempo’ antes de autorizarles una visita o se niega directamente a concederla poniendo como pretexto cualquier condición médica.
También deberían tener sospechas si no se les permite tener una visita privada con su ser querido en cualquier momento.
Esta es una manera muy común de intimidar o amenazar al residente con el fin de que no diga nada sobre el maltrato o abuso del que es víctima por parte de algún miembro del staff encargado de su cuidado.
5. Cambios repentinos en el testamento, cuentas de banco, u otros documentos financieros del residente
Aún sabiendo que un residente está en todo su derecho de corregir o modificar cualquier documento personal, los miembros de su familia deberían sospechar que algo no anda bien si estos cambios se dan de manera abrupta o si su ser querido no recuerda haber hecho tal cosa.
Es posible que el paciente haya sido obligado a hacer tales modificaciones o a develar los números de alguna cuenta bancaria mientras se encontraba bajo la influencia de medicinas o después de haber sido amenazado físicamente.
Si uno de sus familiares presenta alguna de las señales enumeradas arriba, usted debe tomar cartas en el asunto de inmediato para asegurarse de que la situación no pase a mayores.
En el caso de descuido o negligencia médica, llame al centro cada tres horas para saber si el paciente ha sido movido, acicalado, bañado, etc.
Si usted sospecha de que hay abuso sexual o físico involucrado, considere trasladar al residente a otro lugar donde le brinden los cuidados que necesita. Por otro lado, si es un hecho que su ser querido es víctima de este tipo de maltratos, trasládelo inmediatamente y póngase en contacto con un abogado para interponer una demanda en contra del personal y de la residencia que lo ha tenido a su cargo.
Más importante que lo anterior, no deje en el olvido a su ser querido: conozca a fondo en qué consiste su tratamiento y los cuidados que se le brindan diariamente. Los familiares suelen ser los mejores abogados en casos como éstos.
Cuando usted toma interés en el asunto, está visitando y preguntando constantemente por un paciente, los miembros del staff lo pensarán dos veces antes de perpetrar cualquier tipo de abuso en contra de él. No olvide que los residentes también tienen derechos, y tener a la familia de su lado asegura que éstos no sean violados por cualquier miembro irresponsable del personal.
Para obtener mayor información sobre maltrato o negligencia médica en residencias, haga click en el siguiente enlace:
Abogado New Jersey: Maltrato y Negligencia Médica