Como firma legal que representa a víctimas afectadas por los tristemente famosos implantes de cadera DePuy, nos mantenemos al tanto de quejas y reportes que suceden a lo largo y ancho de Norteamérica.
¿La FDA aprueba dispositivos médicos casi por defecto?
Aunque en teoría la mayoría de pacientes asume que el fabricante de la prótesis que porta (DePuy, Zimmer, Johnson & Johnson, Stryker, etc.) ha recibido la aprobación de la FDA para la comercialización de su dispositivo, no necesariamente es verdad en todos los casos: durante años la FDA ha hecho la vista gorda cuando se trata de la normativa 510(k), que permite el lanzamiento de estos nuevos implantes al mercado (así sucedió, por ejemplo, con el implante de cadera DePuy) sin ser revisados exhaustivamente por la FDA.
¿Es eso posible? Sí, este vacío legal permite a los fabricantes obtener la aprobación de la FDA si un supervisor médico calificado asevera que el producto es “prácticamente equivalente”, tanto en seguridad como en efectividad, a otro producto previamente aprobado por esta entidad.
Irónicamente, aunque DePuy sostenía que sus prótesis ASR XL Acetabular o Resurfacing eran “prácticamente equivalentes” a otros implantes de cadera, nunca se les exigió fabricar su producto con los mismos materiales usados por los otros dispositivos con los que se comparaban. Por ello, los reportes muestran que la FDA nunca consideró los efectos negativos que tanto el cromo como el cobalto podían tener en la salud de los portadores.
Como resultado, las entidades defensoras de los derechos del consumidor acusan a la FDA por haber permitido que DePuy use materiales peligrosos en sus dispositivos sin ningún tipo de control.
Demandas contra DePuy Orthopaedics: Abogados en New Jersey y Philadelphia
Los estudios realizados a estas prótesis de cadera defectuosas muestran que hubo negligencia desde un principio.
Entonces, ¿Qué podemos aprender de todo esto? Todos los pacientes que vayan a someterse a un proceso quirúrgico de implante de prótesis de cadera, deben previamente preguntar si el dispositivo a usarse ha recibido la aprobación formal de la FDA o fue admitido aprovechando el vacío legal generado por la 510(k).
Si tiene dudas al respecto o desea denunciar a DePuy Orthopaedics, póngase en contacto con el Estudio de Abogados Mininno para una evaluación gratuita de su caso o llámenos al (856) 833-0600 en New Jersey, o al (215) 567-2380 en Philadelphia.
Deje que nuestro experimentado equipo de profesionales obtenga la compensación económica que usted merece.
Afortunadamente, el futuro que le espera a este tipo de prótesis articular artificial parece ser brillante. A pesar de lo sucedido con este implante de cadera, los científicos, ingenieros metalúrgicos, investigadores y demás, están constantemente a la caza de mejores opciones. Del otro lado, compañías como DePuy Orthopaedics y Johnson & Johnson cuentan con un enorme poder económico que les permite ser los primeros fabricantes en lanzar sus productos al mercado: como tal, surge la pregunta de si esta ‘motivación financiera’ es la causa de que los fabricantes digan que un producto está listo antes de concluir o realizar todos los estudios pertinentes.
Como firma legal que conoce de cerca los pormenores del caso del 
Afortunadamente, el Estudio de Abogados Mininno trabaja bajo el concepto de ‘honorarios de contingencia’, que le permite contar con la mejor representación legal posible sin tener que pagar un solo centavo por adelantado: esto significa que usted cuenta con nosotros ahora y paga después.
Como firma que atiende casos de demandas locales contra DePuy Orthopaedics, hemos empezado a notar una tendencia preocupante en lo que respecta a los sectores de la ciudadanía que se han visto más afectados por este
Los estudios están mostrando que los implantes de cadera DePuy necesitan ser retirados mucho antes que los implantes tradicionales. En añadidura, dado que el continuo roce entre sus elementos está desprendiendo partículas de cromo y cobalto en el torrente sanguíneo, se espera que los pacientes afectados muestren inflamación y lesiones significativas en los tejidos y estructuras cercanas. Nadie sabe realmente qué tipo de consecuencias permanentes tendrá la acumulación de estos metales en el sistema circulatorio, cardiaco o nervioso de las víctimas.
Esta era su primera ‘oferta’ de compensación, pero lo cierto es que no significó absolutamente nada: DePuy se negó tan siquiera a considerar asumir gastos por pérdida de salarios, gastos médicos, u otro tipo de compensación por daños que resultan de la producción, distribución y uso de
Si usted es uno de los desafortunados pacientes que lleva uno de los 
